Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas perseguimos el bienestar físico, psíquico y social constantemente. Hasta ahora, la cirugía plástica no estaba del todo bien considerada en el seno de la población, que criticaba a dedo aquellos que creía que habían pasado por quirófano. Los resultados que se conseguían de las diferentes intervenciones eran un tanto artificiales y visibles para los demás. No obstante, en la actualidad las cosas han cambiado. La cirugía plástica es vista como una vía igual de factible que otra para conseguir una buena salud física, psíquica y social, que sobre todo actúa como rompedora de complejos. ¿A qué es debido este cambio? A los resultados tan naturales que se han logrado con el paso de los años.
Así pues, desde Dr. Junco, Cirugía Plástica y Estética podemos constatar que las últimas tendencias en este sector apuntan hacia un look más natural, huyendo de los resultados con aspecto quirúrgico. Los pacientes también lo interpretan de este modo, puesto que se adentran en el quirófano con el objetivo de alcanzar una apariencia lo más natural posible. Gracias a ello, mujeres y hombres que recurren a ella se sienten ahora orgullosos. La cirugía plástica ha dejado de ser un escondite para pasar a estar completamente aceptada socialmente. Ahora se ha visto que la línea entre estética y curación es muy fina: a menudo vemos cómo un procedimiento supuestamente ‘frívolo’ es capaz de mejorar la calidad de vida de un paciente. Gana en confianza, autoestima, felicidad y, por lo tanto, en salud.
La honestidad del profesional
Pero los resultados naturales siempre pasan por la honestidad de un buen profesional, no únicamente de los materiales que utiliza o el grado de innovación de las técnicas que empra. Y, ¿cómo puede el paciente evaluar la honestidad de su cirujano? La información que éste le proporciona es la clave. La comunicación entre ambos actores es crucial a la hora de explicar cuáles son las expectativas reales del paciente y qué riesgos o complicaciones incluye la intervención (además de requisitos pre y postoperatorios, el tipo de cirugía, qué anestesia se utiliza, etc.). Así pues, nosotros creemos que en el trato hay que ser honesto, sincero y humano, algo que también determinará la satisfacción final.
En la actualidad, las cirugías que más se practican siguen siendo las mamarias: aumento de pecho, elevación, reducción, cirugía de secuelas mamarias, mamas tuberosas… Son muchas las mujeres que consideran los senos una parte del cuerpo fundamental para resaltar su feminidad, siempre persiguiendo unos resultados naturales.
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