El número de intervenciones estéticas practicadas durante el periodo navideño ha aumentado respecto los niveles normales. Tanto ha sido así que estas vacaciones se han practicado entre un 15 y un 20% más de cirugías estéticas en nuestro país, dependiendo del tipo de intervención. En esta época del año, entre las intervenciones más demandadas por los pacientes se encuentran las faciales, las cirugías de mama y la liposucción, aunque también son muy comunes las cirugías que implican intervenciones más cortas y recuperaciones más rápidas, como la corrección de arrugas, la rinoplastia parcial o la cirugía de orejas.
Existen varios motivos que provocan este aumento de las intervenciones en la época navideña. Más allá del regalo de este tipo de intervenciones entre familiares o personas muy cercanas, algo que se da de forma común en otros países, este aumento se debe principalmente a tres factores: la disponibilidad de días libres para someterse a la intervención y recuperarse bien, el hecho de recibir paga extra o regalo en metálico y el factor psicológico relacionado con los deseos del año nuevo.
Además de estos motivos principales, los cirujanos recomiendan someterse a según qué tipo de intervenciones durante el invierno, ya que le hecho de vestirnos con más ropa puede ayudar a que pasen desapercibidas y faciliten la recuperación.Así pues, las navidades se configuran como un buen momento para realizarse la intervención que se desea.
Aparte de las cirugías líderes, como son el aumento de mamas o las liposucciones, últimamente están proliferando otro tipo de intervenciones que tienen como objetivo combatir la edad y rejuvenecer el aspecto. De esta forma, han aumentado en los últimos años la reducción de lóbulo de la oreja o la braquioplastia y la curoplastia (cirugías para estirar la piel flácida de brazos y muslos).
Todas las intervenciones estéticas aumentan, pero las que se encuentran más en auge son las conocidas como “cirugía íntima”. Cada vez son más los hombres y, sobretodo, las mujeres que se someten a intervenciones relacionadas con la cirugía vaginal, el alargamiento de pene o la liposucción de pubis. Éstas están diseñadas para mejorar tanto la estética como la funcionalidad de los genitales masculinos y femeninos. Los datos apuntan a que este tipo de intervenciones han aumentado un 50% en los últimos años.