Los pendientes son un complemento de belleza femenina que puede llegar a tener un punto fetichista. Muchas mujeres se sienten desnudas si no llevan pendientes y a veces, más por imperativo estético que por comodidad o salud, los pendientes pueden ser demasiado grandes o pesados para el lóbulo de las orejas.
La lobuloplastia o cierre de lóbulos en una intervención de cirugía estética que se practica en los lóbulos de las orejas para recuperar su forma original. Muchas veces, los pendientes son los culpables que el lóbulo de la oreja se deforme con el paso del tiempo. Pendientes demasiado pesados que hacen que el agujero de la oreja se agrande y alargue, un tirón o movimiento brusco con el consiguiente desgarro, un agujero mal hecho o simplemente, lóbulos afinados por el paso de los años pueden ser los culpables de que el lóbulo pierda su forma redondeada. Hoy en día, también acuden a la consulta del Dr. Junco pacientes que desean reparar unos lóbulos deformados tras el uso de dilataciones.
Con la reconstrucción o el cierre del lóbulo se embellecen las orejas en todo su conjunto. Se trata de una cirugía muy simple que se realiza en la consulta del Dr. Junco con anestesia local y con una duración inferior a los 15 minutos. En la mayoría de los casos, la reparación del lóbulo de la oreja es bastante fácil y las molestias durante el postoperatorio son mínimas. Los puntos de sutura se retiran a los 15 días y tras un mes, se pueden volver a realizar los agujeros en los lóbulos, a ser posible alejados de la cicatriz para evitar nuevo desgarro.