Hoy en día, la Miomodulación Química Selectiva es la reina de los tratamientos estéticos. Por sus fantásticos resultados al tratar el rostro y el aspecto joven y descansado, es uno de los procedimientos estéticos más demandados. Es altamente recomendado para mejorar la elasticidad de la piel y acabar con aquellas arrugas que nos preocupan.
Antes de su aplicación, existen diferentes aspectos que el paciente debería conocer. Descúbrelo todo sobre la Miomodulación Química Selectiva:
- Sirve para corregir arrugas existentes y prevenir su aparición en un futuro.
- Sus efectos dependen de las características de la piel del paciente. El grosor, la fuerza del músculo y la profundidad de las arrugas juegan un papel importante en este aspecto. Sus beneficios se aprecian a partir del tercer día de la inyección y desaparecen después de 5 o 6 meses.
- Puede aplicarse en todo tipo de pieles, sin importar el sexo del paciente (sea hombre o sea mujer).
- No es recomendable en las mujeres que se encuentran en período de embarazo.
- El paciente no tiene un número máximo de sesiones recomendadas.
- La cantidad máxima que habitualmente se utiliza es de 50-100 unidades por ampolla. Es imposible que esta cantidad desencadene un cuadro de botulismo en el paciente.
- Es una proteína purificada y sintetizada para fines de salud médica. Por ello, es importante desmentir la posible toxicidad de la sustancia.
- La sustancia no debe ser inyectada en todos los músculos de la cara. Cada paciente requiere una forma de inyección estratégica y de forma personalizada según su anatomía, para así conseguir resultados totalmente naturales y evitar caras con efecto de porcelana.
- Más que paralizar, consigue debilitar temporalmente el músculo en el cual se inyecta.
- Conforma un tratamiento rápido que no precisa de anestesia previa. Además, no interfiere con la vida laboral y social del paciente.
- La sustancia no es inyectada en la arruga, sino en el músculo que la genera.
- Es totalmente combinable con infiltraciones de ácido hialurónico, sustancia totalmente diferente. Si ésta última se inyecta debajo de la arruga, se consigue más volumen allí donde falte.
- Las zonas más comunes en las que se realiza la miomodulación corresponden al tercio superior de la cara: frente, entrecejo y patas de gallo.
- Otras indicaciones son el tratamiento de las migrañas, la sudoración excesiva, espasmos musculares en el cuello y los ojos (como el blefaroespasmo), de entre otras opciones.
- Es totalmente incierto que el paciente deba esperarse a tener las arrugas muy marcadas para empezar a tratarse con inyecciones botulínicas. Aun así, es recomendable empezar-las a partir de los 35 años de edad.